El elenco teatral Trío Mal de Amores dará en julio la última función del ciclo El Teatro es Útil. Un proyecto que inició en marzo y parte de intercambiar entradas por útiles escolares para niños de escuelas rurales de Villa María y la zona.
Junto a un destacado grupo de músicos, Ignacio Stanfield, Pedro Brignone y Ramiro “Chumy” Chanquía se presentan una vez más en el Teatro Club Sarmiento con COVERSación entre tres, una obra fulgurante que desde el 2019 sigue convocando al público.
“Y ahora, ¿Cómo seguimos?”
Alfredo, Salomón y Miguel son unos desventurados en el amor que siempre tiene algo nuevo para decir, cantar o confesar tanto arriba como abajo del escenario. COVERSación entre tres lleva cinco años girando y aunque algunos ya la vieron más de diez veces, otros recién la descubren.
“Trabajamos y creemos tanto en esta obra que la queremos hacer siempre para que la vea todo el mundo”, dice Ramiro. “Estamos muy agradecidos con la gente. Somos bastante inseguros cada vez que planteamos una función, pero siempre se agotan las entradas y eso es increíble. Yo hace más de 20 años que hago teatro y nunca me había pasado con otra obra”, comenta.
Luego de un recorrido que incluye la estatuilla a la Mejor Producción Cordobesa en los Premios Carlos (2020) y dos nominaciones más en la categoría Mejor Espectáculo Humorístico Musical (2022 y 2023), este año el puntapié para lo nuevo fue la pregunta “¿cómo seguimos?”. En un contexto complejo para el arte y la vida en general, la respuesta fue: El Teatro es Útil.
El camino hacia las escuelas rurales
“Nosotros somos casi todos docentes y ya para el comienzo de clases veíamos que la situación estaba complicada. A la vez, queríamos seguir haciendo funciones en Villa María y sabíamos que estaba difícil para cobrar entrada”, cuenta Ramiro acerca de cómo surgió el proyecto.
Primero contactaron a la directora de la Medioteca Anabella Gill, y luego a la Inspección para preguntar por “las escuelas más necesitadas”. Para empezar, la lista incluía a cinco escuelas rurales: Julio Argentino Roca (Villa María – Monte de los Lazos), Fray V. Taboada (Tío Pujio), José de San Martín (Sanabria), Cristóbal Colón (Las Cuatro Esquinas) e Islas Argentinas (Las Mojarras).
Con “el gran acompañamiento” del sponsor Don Omar y “algunos ahorros propios” de la producción, el proyecto se puso en marcha. “Fue un camino hermoso que fue creciendo con cada función. Nos terminamos encontrando con una respuesta impresionante por parte de la gente”, dice Ramiro.
“¿Para qué sirve el arte?”
“La sociedad funciona gracias a la imaginación. El arte sirve para que funcione todo lo otro”, dijo alguna vez el escritor Alberto Laiseca. En El Teatro es Útil hay una doble apuesta, en el arte como respuesta política y en esa “humanidad” que menciona Ramiro, abriéndose paso en los pequeños gestos.
Un carpintero aparece para construir un armario. Otro después donará un pizarrón. ¡Alguien ya regaló un escritorio antes de que la escuela lo pidiera! Y por allá alguien más viene con una bolsa de diccionarios sin saber la falta que hacen.
“Todo es hermoso en este proyecto. Se sumó gente para acompañar, filmar, fotografiar, ayudar. Es increíble – cuenta Ramiro- pero un momento que nos gusta mucho es cuando vamos a las escuelas a llevar las cosas. Compartimos una mañana con los chicos, yo hago mi espectáculo de payaso, también Popi Lauría y Pablo Vélez tocan unas canciones hermosas… jugamos, nos divertimos. Ese es el momento preferido nuestro”.
El agradecimiento desde las escuelas
Melisa Olaviaga es directora de la escuela Julio A. Roca. Desde allí, comenta: “Muchas veces las escuelas rurales estamos postergadas. Con este proyecto sentimos que fuimos tenidas en cuenta, nos pusieron la mirada. El proyecto aportó no solamente desde lo económico, sino también desde el amor. Ellos vinieron a la escuela y eso fue muy significativo para los más pequeños”.
Por su parte, desde la escuela José de San Martín, de Sanabria, la directora y maestra Magalí Bertone cuenta: “Nos ayudaron muchísimo como institución porque sinceramente no teníamos nada de útiles. Ahora hasta nos quedó material para seguir trabajando en la segunda etapa. Fue todo muy lindo y estamos muy agradecidos”.
“Un negocio perfecto”
Dice Ramiro: “Este proyecto es un negocio perfecto porque nosotros hacemos nuestro espectáculo y la gente disfruta, se divierte, se emociona, lleva los útiles. Después nosotros se los llevamos a los chicos con una propuesta artística y ellos se ríen, se emocionan, nosotros también, y nos vamos llenos de abrazos, ¡con lo que cotizan hoy!”.
La última función del ciclo, por ahora, será el sábado 27 de julio en el Teatro Club Sarmiento a las 21:30 horas. Mientras tanto el grupo busca “conseguir un sponsor más” y se entusiasma con la idea de situar este mismo proyecto en otras localidades.
“Hay una frase que dice que el teatro no sirve para nada pero es indispensable. Por eso yo uso la palabra negocio de manera caprichosa. Hoy parece que todo negocio debe ser a cambio de dinero o que lo único que importa es recaudar e insisto: por suerte existe la poesía, nos hace sobrevivir a este mundo”, dice.
Fotos: Valeria Colombatti
