En noviembre tendrá lugar el 1er. Congreso Nacional de Niñeces Trans. Organizado por la asociación civil La Casita Trans, el encuentro se realizará en la Facultad de Odontología de la UNC (Córdoba).
Con disertantes y especialistas de todo el país, se debatirá acerca de los derechos de niñeces trans, no binarias e intersex. Las inscripciones, libres y gratuitas, están abiertas.
“Hoy resulta fundamental plantarnos, hacer un foro para darle lugar a las voces de las niñeces, reconocer los derechos que ya ganamos y defenderlos”, dice Federico Arias (23) desde la asociación.
La Casita Trans de Córdoba
Hola, me está pasando esto, ¿con quién puedo hablar? Hola, necesito hablar con alguien que esté atravesando lo mismo. Hola, ¿me pueden ayudar? Desde el 2017, La Casita Trans acompaña “de forma amorosa y respetuosa a las infancias y juventudes en su transición”, como así también a sus familias. Son muchos los mensajes y las consultas que reciben desde entonces.
Este acompañamiento se da en todos los ámbitos, explica Federico, y abarca desde las consultas médicas, lo vinculado a la salud mental y la asesoría legal, hasta lo referido al arte, la parte social y el deporte.
Así, en La Casita hay diferentes consultorios de atención, pero también hay espacio para un equipo de fútbol que este fin de semana competirá en la Copa Cüir. “Hacemos diferentes encuentros para que las familias puedan conocerse y conectarse entre sí, porque creemos en el poder de las redes reales y presenciales”, dice.
Madres bienvenidoras
En la actualidad, son 80 las familias que integran La Casita Trans. “Y cada día llegan más -dice Federico- entonces tenemos un grupo de familias bienvenidoras, en su mayoría madres que son la primera generación de madres de La Casita”.
“Son ellas quienes reciben a otros padres y otras madres… Cuando nos llega una consulta, tratamos de ver quién tiene una historia similar para que la experiencia sea lo más cercana posible a la hora de acompañar una transición”, explica.
Las niñeces y las juventudes son el corazón de “La Casita”, dice también. “Son elles quienes más nos necesitan actualmente. Es por eso que armamos este congreso”, indica.
A la luz del contexto actual, el congreso propone una conversación sobre las problemáticas y los desafíos. Sobre esto, Federico menciona: “Hay un discurso de odio muy fuerte que sí o sí tenemos que traer al disenso. Porque cuando el odio se instrumentaliza políticamente, es mucho más peligroso”.
Una casa propia
En agosto de este año, La Casita Trans recibió de Emmanuel Vich la donación de una casa. Es el premio que el ganador del reality, Bautista Mascia, le cedió a Emmanuel. “Nos puso muy felices. Ahora estamos en campaña para conseguir el terreno donde ubicar esa casa que está prefabricada”, cuenta Federico.
“Que el premio final vaya para nosotres, una organización que acompaña a infancias y juventudes trans, me parece otra victoria para el amor y los derechos humanos teniendo en cuenta el reality del que hablamos, -dice-, un reality donde prima la espectacularización de todo, incluida la violencia”.
Es como un abrazo
Federico llegó a La Casita Trans en carácter de estudiante de periodismo. Quería entrevistar y escribir un perfil de Santiago Merlo, el presidente de la asociación. Después de eso, se quedó.
“Ya había transicionado, no acudí para pedir ayuda, como suele suceder con la gente que viene a La Casita. Y nunca antes había militado en otra organización durante tanto tiempo… Es mi militancia más estable”, cuenta.
Y agrega: “Yo nací con muchas leyes bajo el brazo, la Ley de Educación Sexual Integral, la Ley de Identidad de Género, la Ley de Matrimonio Igualitario, la Ley del Cupo Laboral Trans, la Ley del DNI No Binario… entonces, hasta 2022, pensaba que no iba a tener que luchar muchísimo, pero este gobierno nos muestra que siempre hay que salir a las calles”.
“Nuestra militancia sigue, y La Casita Trans, como pensamos quienes la integramos, es un gran abrazo que salva vidas”, dice.