Seis alumnas de la Escuela PROA Laboulaye idearon una App para pulverizaciones eficientes. Con la iniciativa avanzaron a la instancia nacional de Feria de las Ciencias.
El proyecto está enmarcado en la instancia pedagógica de las Buenas Prácticas Agropecuarias (BPA).
La aplicación tiene como objetivo facilitar el cálculo para la preparación de los tanques de pulverizadoras de agroquímicos.
La coordinación académica del proyecto fue liderado por las docentes Débora Magliano y Nerina Ulliana y las alumnas que pergeñanaron la investigación fueron: Esther Paredes, Paz Castro, Lourdes Badini, Alejandra Clara, Abril Zabaleta y Marlena Orsa.
Idearon una App
En esta aplicación se ingresan valores, tales como cantidad de hectáreas, volumen de los tanques y productos fitosanitarios, y el sistema devuelve la cantidad de carga que demandará el área a pulverizar, las cantidades de fungicida a insumir y las hectáreas a fumigar en cada una de ellas.
De acuerdo a lo consignado en el proyecto original se perseguía el objetivo de facilitar los cálculos en pos de que no se derroche producto con el horizonte puesto en el cuidado del medioambiente.
Alumnas del PROA
“Desde los primeros años venimos trabajando con programación. Nos llamó mucho la atención esto de las BPA y comenzamos a investigar aunque no seamos un colegio de agro”, dice Lourdes Badini a Villa María Educativa.
“Nos costó investigar y lo hicimos mucho. Fue difícil encontrar alguien que nos hable. Estamos sorprendidas porque elaboramos encuestas y creímos que no nos iban a contestar, y si lo hicieron”, refleja.

La escalada de la selección del proyecto en base a las BPA fue seleccionado en el marco de otros cien proyectos.
La alumna Paz Castro, en tanto, sintetizó: “Con este proyecto, con toda la trayectoria, me siento muy orgullosa ya que logramos algo que nunca habíamos hecho que no es más que pasar a una instancia nacional”.
Y agrega: “Como somos una escuela de programación, pero no de agro, nunca se nos habló de esto… Por eso fue muy duro investigar y de paso aprendimos mucho a investigar bien y comprobar la información”.
Esther Paredes calificó a la experiencia de “linda e inolvidable” y ancló el objetivo de desarrollar una aplicación para pulverizaciones “ya que vivimos rodeados de zona agropecuaria. Por eso nos centramos en aquello que nos rodea”.
Un proyecto integrador
Una de las docentes asesoras, Nerina Ulliana, explicó que al proyecto “se lo trabajó durante gran parte del año y resulto súper provechoso”.
Habló de la importancia del hecho que se pudo abarcar muchas áreas de trabajo “y teníamos que hacer como si fuéramos una empresa de software. De hecho teníamos áreas diferentes tal como existen en una empresa”.
Añadió: “Así fue que pudimos lograr que los chicos se interesen, que obtengan logros, y que el trabajo en equipo se note, lo cual tuvo sus frutos”.