Transcurrieron dos semanas desde que la Escuela Remedios de Escalada (Tío Pujio) tiene nueva directora. El 20 de marzo el Ministerio de Educación removió de su cargo al denunciado director Daniel Tissera, asumió la docente Marina Pautasso, y hasta hoy no se le encuentra espacio de trabajo mientras espera de licencia.
Las voces de las maestras se multiplican a la hora de analizar el cambio de clima institucional que se respira por aulas y pasillos y atrás quedó una de las tantas malogradas frases que se le adjudican a Tissera: “A ver si queda claro: esto no es una democracia, esto es una escuela…«.
Escuela Remedios de Escalada
Quedan retazos del polémico paso de Tissera en la dirección de esa escuela primaria. Algunos testimonios recogidos por Villa María Educativa se refieren a los ecos acaecidos durante esa gestión: “era realmente muy hostil el clima institucional. Había mucha división entre el personal, las maestras estábamos muy incómodas, algunas como con miedo y otras con la clara intención de no confrontar para no tener problemas”.
“Él se manejó siempre de manera muy autoritaria y utilizando las amenazas ´sutiles´, el tono de voz elevado y desafiante, o la postura corporal intimidante, para callar el reclamo o el cuestionamiento…”, rememora una docente.
“Esto no es una democracia, es una escuela”
Los comentarios del ex director iban desde el «si no te gusta, hay un montón de oferta laboral, anda a otra escuela» (camino que recorrieron muchas docentes) o «averigua bien antes de hacer retención de servicio…, no vaya a ser que no sea como vos crees…» cuando debía responderle a una docente ante un MAB no procesado siendo que hacía meses que no cobraba por su tarea.
A una docente aún le replica en sus recuerdos la frase: «A ver si queda claro, esto no es una democracia, esto es una escuela…«. Contextualiza su testimonio diciendo que esas palabras fue el corolario de una reunión en plena pandemia donde algunas docentes le proponían otras formas de llevar adelante las actividades, la evaluación y la comunicación con las familias.
Abrazar el valor y denunciar
Muy pocas docentes fueron capaces, durante gran parte de esa gestión, de enfrentar a Tissera con acciones legales que a priori deben protegerlas. Dentro del sistema educativo, también, funciona el “no te metas” para sobrevivir laboralmente frente a las impetuosas acciones de un directivo.
El hilo comenzó a no cortarse más por la faz más débil y una docente de Ramos Especiales lo denunció penalmente por violencia laboral y de género. Como preludio, además, la denuncia también llegó a Inspección. Lo demás es casi conocido: intervención ministerial de la escuela, actas con testimonios de colegas que avalaban esa denuncia y otras opinaron que «no era tan así…«.
“Muchas veces fuimos a trabajar con dolor de panza”
La última etapa de esta tormenta institucional se produjo el propio 20 de marzo pasado, un día después que se conociera que el ex directivo pensaba volver apoyado en que la sentencia aún no estaba firme y por la Supervisión. Un testimonio es más que contundente en este sentido: “el malestar era generalizado. De modo tal que muchas fuimos a trabajar con dolor de panza, con miedo por no saber cuál iba a ser su postura. Las miradas entre nosotras lo decían todo”.
Fuera del edificio, bajo una llovizna y la mirada de efectivos policiales, parte de la comunidad educativa reclamó que no debía volver. Horas después se producía la noticia que había nueva directora, una docente del establecimiento.
El actual clima institucional
Marina Pautasso era la docente de mayor edad en el cargo, fue seleccionada y aceptó el desafío. “Lo cierto es que desde que Marina está en el cargo hasta las reuniones de personal son más amenas. Las lleva adelante el equipo directivo completo, las vicedirectoras también toman la palabra y las decisiones son bastante consensuadas”, puntualiza una de las docentes consultadas.
La huida obligada de Tissera y la llegada de Pautasso se dio en pleno comienzo del ciclo lectivo. “Las jornadas para definir los proyectos institucionales y el plan de trabajo, fue fundamental ya que los redactamos entre todas, de manera consensuada y horizontal”, explican las maestras. Los testimonios recogidos se aúnan para destacar que la actual directora hizo lugar a distintos reclamos que hacía años las docentes realizaron sin tener respuestas.