Martín Salort estudia Ciencias Económicas en la UNC y juega al fútbol en el Club Atlético Belgrano. Su día se nutre de prácticas deportivas por la mañana, un breve descanso, repasar apuntes por la tarde y cursar por la noche.
La actualidad de este villamariense, de 18 años, se fija en el reflejo de las habitualidades que le devuelven otros espejos como racimos de esfuerzos: mamá docente (Natalia Andreoli), hermanos profesionales y papá (Fernando) productor agropecuario.
Martín (hoy superando una lesión) es defensor (lateral izquierdo) en la Cuarta División (de AFA) de Belgrano y antes de partir (enero 2025) contaba con varios partidos en la Primera División del Club Alumni, el fortinero villamariense.
Estudiar y jugar al fútbol
“Hablando sobre esta dualidad entre el fútbol y mis estudios, principalmente lo que me motiva es el deseo de crecer, constantemente, en ambos aspectos”, responde Martín a la consulta de Villa María Educativa. Avanza: “El fútbol es mi sueño, mi pasión, lo vengo haciendo desde muy chico, pero estudiar también me da herramientas, te abre la cabeza y te prepara para el futuro”.
Después de un Primer Cuatrimestre con sobresaltos, el presente lo encaja en una rutina con mayor comodidad, cursando el 1° año de Ciencias Económicas, buscando un posible horizonte como Contador, Administrador o Economista, ya que deberá elegir cuál de esta especialidad transitar.
“Saber cómo progresar, tanto dentro como fuera de la cancha, te hace tener equilibrio, tranquilidad y lo que me llevó a cumplir ambas actividades al mismo tiempo es que, la verdad, al fútbol siempre lo jugué, una pasión muy grande, y la formación académica te prepara para el futuro, lo considero muy importante”, subraya.
Martín navega, entre apuntes, por el lateral izquierdo de un barco “pirata”
¿Cómo organizarse? Sin duda, la premisa fundamental para desandar ambos caminos. “Algo clave para lograr esa dualidad es la organización del tiempo: entreno de lunes a viernes, y juego los sábados por la mañana y las tardes me quedan libres, ya que el descanso, en el fútbol, es importante”, responde.

“Ya le voy agarrando la mano a los estudios, al principio me costó, y bastante la verdad, pero la cuestión es no tratar de intentar, no frenar. Ahora curso de 6 de la tarde a 10 de la noche. En esta segunda etapa del año me está yendo mejor”, explica a modo de desafío.
La formación villamariense de Martín
Martín cursó Inicial y Primario en el Instituto San Antonio y el secundario en el Trinitarios. Lo recuerda: “Muy lindos recuerdos de ambos colegios me quedaron. Tuve muy buenos momentos, hermosos recuerdos con profesores y profesoras de ambos colegios”.
Atravesando el puente de la adolescencia hacia la adultez, Martín rememora y almacena de las experiencias vividas: “Mi mamá era maestra en el San Antonio y hasta finalizar la primaria iba con ella todos los días al colegio. Eso creo que también me formó bastante”.


Es hermano de Juan (Contador Público) e Ignacio (Abogado), ambos también jugadores en Alumni, quienes aportan a su espejo formador: “Como que también el ejemplo de verlos, si ellos pudieron hacerlo, uno también puede. Acá en Belgrano hay otros jugadores que también cursan carreras universitarias. Persistir, seguir y acostumbrarse. Son dos ambientes muy lindos, que te llevan a cosas buenas, muy sanos, y la verdad que Belgrano me brinda mucho: es un club muy organizado, me da la comida necesaria en proteínas, y la infraestructura del predio es muy linda, los profesionales, tanto técnicos como preparadores físicos, son muy buenos y en la facultad también…, clases de apoyo y de consultas con profesores”.
Contexto: Villa María Noticias.