A partir del presente ciclo lectivo, todas las instituciones educativas han tenido la oportunidad de ratificar sus acuerdos de convivencia. El 80% de los niveles Inicial y Primario produjeron cambios en ese sentido.
En este 2024, el Ministerio de Educación continuó promoviendo la revisión de los Acuerdos Escolares de Convivencia (AEC) en las escuelas. Como parte de las acciones para lograr este objetivo, en junio se llevó a cabo una jornada institucional en el que cada comunidad educativa a partir de un trabajo colaborativo realizó la revisión de dichos acuerdos.
El 80% de las escuelas cambiaron sus acuerdos de convivencia
Estos AEC garantizan instancias que promueven la convivencia y el bienestar educativo. En ese marco, las comunidades escolares informaron el resultado de su trabajo, por el cual ratificaron o rectificaron sus acuerdos. A partir de la información sistematizada se determinó que, en el nivel inicial y primario de gestión estatal, más del 80% modifican sus AEC; mientras que en el mismo nivel de gestión privada constituyen el 60%.
Por su parte, en el nivel secundario orientado estatal, el 98% de las instituciones educativas modifican sus acuerdos, mientras que en la modalidad técnica el 80%; en relación a secundaria gestión privada el porcentaje constituye el 71%.
“El uso del celular no debe centrarse desde una actitud prohibitiva”
Según la cartera educativa “el uso del celular en el aula constituye una temática de constante análisis en las instituciones educativas, en este marco el debate no debe centrarse desde una actitud prohibitiva, sino enfocarse en el uso pedagógico del mismo quedando plasmado y explicitado en los acuerdos y en marco de la corresponsabilidad escuela-familia”.
En tal sentido Claudia Méndez Supervisora Educación técnica, explicó: “En la totalidad de las escuelas de mi zona consideraron que el celular es una herramienta muy valiosa a la hora de enseñar y aprender por lo que acordaron su uso con fines pedagógicos. La autoridad pedagógica en el aula es un factor clave a la hora de pensar si el celular es un distractor o no. En este sentido son claves también las buenas prácticas de los docentes ya que si el celular es usado por los mismos también solo con fines pedagógicos motivarán a sus estudiantes a que el celular a la escuela se lleva para aprender”.
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