9 de cada 10 familias consideran que las posibilidades de que sus hijos e hijas consigan empleo aumentan si terminan la escuela, de acuerdo con una encuesta a familias que viven en barrios populares de ReNaBaP.
Según una encuesta, 9 de cada 10 familias (89%) consideran que las posibilidades de sus hijos/as de conseguir empleo crecen si terminan el colegio secundario. Adicionalmente, las familias destacaron la importancia de que sus hijos e hijas reciban formación profesional, laboral y de oficios durante la secundaria.
Los datos surgen del informe “¿Qué esperan de la educación las familias de los barrios populares?”, del Observatorio de Argentinos por la Educación y la Secretaría de Integración Socio Urbana del Ministerio de Desarrollo de la Nación.
El informe se basa en una encuesta de alcance nacional a una muestra exploratoria de 540 familias de barrios populares con hijos e hijas en la escuela primaria y secundaria. Por medio de la encuesta y de un estudio etnográfico, buscaron identificar las demandas y expectativas de estas familias respecto de la educación de sus hijos e hijas.

Enseñanzas de oficias e idiomas, lo más demandado
La enseñanza de oficios, idiomas y actividades vinculadas con el mundo del trabajo aparece entre las principales demandas de las familias encuestadas. Educación Sexual Integral, arte y deporte también son mencionados en los reportes ante la pregunta sobre qué les gustaría que la escuela les enseñara a sus hijos.
“Los sectores populares mantienen la fe en el valor de las titulaciones para que sus hijos tengan acceso al mercado de trabajo. Sus demandas sobre la escuela están asociadas a esta expectativa: quieren computación, inglés, arte y oficios. Supongo que dan por sentado que la escuela les proporcionará los recursos básicos de la cultura como la lectoescritura y las matemáticas”, reflexiona Guillermina Tiramonti, investigadora de FLACSO.

Los reclamos sobre la infraestructura
El 35% de las familias señala que la infraestructura de la escuela a la que asiste su hijo/a se encuentra en condiciones regulares y el 50% afirma que está en buenas condiciones; el 13% restante percibe malas condiciones.
Las cuestiones relativas a mejoras de infraestructura más mencionadas son la calefacción (40%) y los baños (39%).
Otros reclamos frecuentes son la necesidad de más aulas, espacios de recreación, mayor mantenimiento y seguridad. En relación con la conectividad, casi 7 de cada 10 familias (68%) informan que las escuelas de sus hijos/as tienen conexión a internet.
Por otra parte, el informe explora aspectos relativos a los servicios alimenticios en contexto escolar. Según los reportes, la mayoría de los estudiantes solo recibe una comida liviana en la escuela (desayuno o merienda).
En primaria, solo el 10,4% de los estudiantes que van 4 horas o menos reciben almuerzo, mientras que ese porcentaje aumenta a 62,1% en el caso de los que van más de 4 horas. En el nivel secundario, los reportes señalan que reciben almuerzo el 25,2% de las y los que asisten 4 o menos horas y el 25,9% que asisten más de 4 horas.

Eligen las escuelas por cercanía y “buenas referencias”
Otro de los datos destacados del informe indica que la elección de escuela por parte de los grupos familiares se basa, principalmente, en la cercanía: el 55% de las personas encuestadas menciona esa razón, mientras que el 15% menciona que eligió la escuela por “buenas referencias”.
Además, 7 de cada 10 familias (70%) declaran que su hijo/a tarda habitualmente menos de media hora en llegar a la escuela.
