Culminó el ciclo radial “Verde que te quiero verde” del Instituto Manuel Belgrano en Radio Tecnoteca. Esta suerte de aventura radiofónica creció en tiempos de redes sociales buceando en otros senderos de la comunicación.
Cumplieron 20 programas de una emisión semanal que tenía dos horas de duración los días viernes de 18 a 20. Los y las estudiantes participantes fueron de 1°, 2°, 4°, 5° y 6° año.
“Verde que te quiero verde”
La idea original, por primera vez en la historia institucional, fue materializada por los y las alumnas Emilia Roldan, Lucia Rivero, Ciro Laurenti, Lorenzo Guilli, Francisco Ramírez, Francisco Menardi, Bruno Alvez, Camilo Morales, Ivan Druetta, Agustín Liendo, Jazmín Larrazabal y Santiago Leiva.
Se contó con la colaboración en la conducción de una de las egresadas de ese instituto, Julieta Casas Bustamante. El taller fue coordinado desde el área de Extensión de Biblioteca y el propio secundario.
Aventura radiofónica
Marcelo Dughetti, responsable de la Biblioteca institucional, señaló: “Este proyecto ha sido un acierto por parte de la gestión en aceptarlo ya que lo veníamos haciendo desde Biblioteca”.
Los y las estudiantes, en tiempos que le dejaba sus obligaciones diarias, se acercaban a la biblioteca a trabajar en la producción de estos programas. Tiempo después, se terminó estableciendo que de 12 a 13 se llevara a cabo un Taller de Radio, lo que reforzaba la columna vertebral del proyecto.
“En ese taller se trabajó mucho el uso de la voz y logramos la buena voluntad de la Radio Tecnoteca. Los lunes tirábamos las líneas para el programa y cada estudiante decidía que le gustaba hacer en ese marco y proponía notas o entrevistas y la desarrollaba”, explicó.
En tiempos de redes sociales
Esta experiencia radiofónica, sin duda, termina transformándose en un oasis para el lenguaje y el modo de comunicarse frente a lo que proponen las redes sociales.
Dice Dughetti al respecto: “Es hasta obvio plantear lo positivo de todo esto: redacción, oralidad, sociabilidad, trabajar en un medio en situación de comunicación real. No jugaban a hacer radio, hacían un programa de radio concreto con todos sus recursos y debían aprender a utilizarlos”.
La importancia de la herramienta
En la apreciación de Dughetti sobre la importancia de la herramienta radiofónica, sostuvo: “Hacer un programa de radio aparecía como mucho más interesante que hacer un postcast, ya que la idea de vivir el guion que se realizaba y la adrenalina que eso significa en radio. Más poder comunicarse en el momento con oyentes y entrevistados…, para que no aparezca como algo cerrado, envasado”.
Algunas de las secciones fueron: La máquina del tiempo (efemérides, con una visión futurista); Desenchufados (sobre juegos electrónicos y cine); Deporte y Arte en la escuela; Encuestas (sobre un tema en particular cada viernes); Vocaciones y Libros que muerden (literatura).
La experiencia vivida dejó algunos momentos únicos, como el caso de dos madres y una abuela (costurera, enfermera y vendedora de seguros) cada una contando su historia entrevistadas por sus propios hijos y nietos.